Etapas de la deglución
Fase oral preparatoria:
Se lleva a cabo cuando preparamos el alimento
mordiéndolo y masticándolo, para que el mismo pueda ser transformado en un
bolo homogéneo, facilitando la deglución.
Fase oral propulsiva:
Después de preparado, el alimento será posicionado
sobre la lengua, que se acoplará al paladar duro, iniciando un movimiento
ondulatorio de adelante hacia atrás, para llevar el bolo al fondo de la boca.
Cuando el alimento sólido o líquido, junto con el dorso de la lengua, toca los
pilares anteriores, se desencadena el reflejo de deglución propiamente dicho.
El cual es accionado por acción del glosofaríngeo.
Fase Faringea:
Es la más importante porque en ella tiene lugar la protección
de la vía aérea y el paso del alimento al esófago. Esta fase está controlada
neurológicamente por la formación reticular junto al centro respiratorio
determinando una coordinación entre el centro de la deglución y de la
respiración. En esta fase la respiración cesa durante una fracción de segundos
previo a que el paladar blando se cierre, evitando el pasaje del bolo para la
nasofaringe. La pared posterior de la faringe avanza, comprimiendo el bolo
contra el dorso de la lengua. El alimento no podrá subir, ya que el paladar
blando está cerrado, ni volver a la boca, porque el dorso de la lengua está
impidiendo su pasaje para la cavidad bucal. Por lo tanto, el alimento tendrá
que bajar. La epiglotis cierra la glotis y también se cierran las cuerdas vocales.
Todas estas acciones son necesarias para que no haya pasaje del bolo para las
vías respiratorias. En ese instante la faringe se elevará, facilitando este
bloqueo que será concomitante a la abertura del músculo cricofaríngeo, para
que el alimento pueda entrar en el esófago. Durante esta fase de la deglución
el cierre de la laringe se produce gracias a la actuación de tres esfínteres
laríngeos: epiglotis, repliegues aritenoepiglóticos y bandas ventriculares. Con
el objetivo que se produzca el cierre del esfínter laríngeo, la laringe realiza
estos movimientos durante la deglución:
1. Elevación de la laringe hacia el hioides, aproximando el conjunto laringehioides
hacia la mandíbula. Con este movimiento la epiglotis se rebate
hacia atrás.
2. Basculación o inclinación de los aritenoides hacia abajo, hacia delante y
hacia dentro, cierre de la glotis y retracción del vestíbulo.
3. Apertura del ángulo anterior crico-tiroideo, lo que permite a los
aritenoides inclinarse aún más hacia delante.
4. Profusión hacia atrás del tubérculo epiglótico, producido por la
aproximación tiro-hioidea y por la compresión del tejido adiposo hiotiroideo.
Aproximación de los pliegues vestibulares y obliteración de la
cavidad vestibular.
5. Basculación hacia abajo del borde libre de la epiglotis por compresión del
bolo alimenticio.
No obstante, hay individuos que excepcionalmente presentan una modalidad
de deglución diferente, que les permite un débito líquido más elevado: la
laringe se mantiene en posición baja, mientras que la epiglotis permanece
derecha sin rebatirse sobre la laringe como lo hace normalmente.
Una vez que ha sido deglutido el bolo alimenticio la vía aérea se abre para que
la respiración continúe.
Fase esofágica:
Comienza cuando el bolo pasa a través del esfínter esofágico
superior. El tercio superior del esófago está constituido por musculatura
voluntaria e involuntaria, mientras que el tercio inferior está compuesto sólo
por musculatura involuntaria. El esfínter esofágico inferior actúa como una
válvula muscular que se abre para permitir el paso del bolo alimenticio al
estómago.
¿Qué es la deglución atípica y la deglución adaptada?
Según el diccionario, atípico es lo que se aleja de lo normal, de lo típico. A su
vez, adaptar es ajustar una cosa a otra, amoldar, apropiar, acomodarse o
ajustarse.
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